var isMobileBrowser=false;
La solidaridad no es patrimonio de ninguna ideología ni de ningún partido. Miren ustedes en este momento que estamos viviendo, por primera vez, lo que está pasando nos pasa a todos y las consecuencias que se van a derivar de esta situación, van a ser para toda la ciudadanía. Familias que jamás pensaron que el hambre les llegaría... les ha llegado y a otros nos puede llegar. Vamos a ser testigos de grandes transformaciones y de su gestión, tendremos un país u otro. No piensen que les estoy hablando desde la bonhomía, ni mucho menos, les hablo desde la más cruda realidad. Yo jamás, ni en mis más obscuros sueños, pensé o soñé que algo como esto me/nos pudiera pasar.
Durante el tiempo de confinamiento sólo hemos pensado en sobrevivir mientras veíamos cómo amigos, conocidos y compatriotas, se morían. Ahora vamos a entrar en un tiempo nuevo pero no mejor, si no hacemos algo. Vamos a tener que aprender nuevos comportamientos. El primero es de supervivencia pues, para que no tengamos de nuevo una propagación masiva de contagios, como la que ya hemos vivido, el comportamiento y la corresponsabilidad de cada ciudadano van a ser fundamentales. Todos tendremos que adaptarnos, desgraciadamente los primeros nuestros jóvenes que no sé cómo van a relacionarse entre unos y otros acostumbrados a salir, ligar, tomar sus copas... ¿Cómo van a encontrar a su media naranja con el distanciamiento y pensando que el otro puede ser objeto de contagio o viceversa, y llevárselo a padres o abuelos?
(M. Eugenia Bueno)
Estos dos párrafos que os traigo hoy pertenecen a una articulista habitual en el peroiódico local y en mi opinión reflejan perfectamente el estado de ánimo y de opinión de todos nosotros, sea cual sea nuetra opción política. No es cuestión de ideología ni de lugar de nacimiento, si me apuras ni de nacionalidad porque esto ha sido (es) tan fuerte que nos ha golpeado a todos. Como dice Bueno, algo que ni en una pesadilla hubiéramos pensado que nos podría pasar. Pero ha pasado.
Y hay que ser operativos. Una vez que hemos sobrevivido a la enfermedad, al menos por ahora, se trata de hacer un ejercicio de adaptación a esto que va a venir después. Y como ejemplo, fijémonos en un cactus, pincha, no es bonito, pero da unas flores esplendorosas. Es una planta desdolida y aguanta lo que le echen pero luego su flor es exquisita y de lo más efímera. Hay que disfrutar de ese momento. Y eso es lo que hemos aprendido de esta tragedia, que hay que aprovechar el instante y disfrutarlo, porque el futuro es hoy.
Besos.
El futuro está bastante negro, sobre todo para quienes ya tenemos algunos años encima. No es fácil readaptar las costumbres, aceptar las limitaciones como permanentes... No es fácil no, y menos aún romper con métodos de vida que llevan vigentes siglos y siglos.
Buenas noches .
Yo estoy seguro que esta pandemia nos ha cambiado la vida a todos y además creo que a los mas mayores, más.
Nada es lo que era ni lo será.Cada dia es mas agobiante todo y salimos a la calle como con miedo...y pensando siempre que hacemos las cosas mal.
Y luego vemos a gente que menosprecia todo , que no cumple las reglas y se cachondea de todo.Una pena ...
y si , hay que disfrutar cada vez más de ese momento que nos hace feliz o nos distrae.
De momento seguimos sin poder ir ni salir de Barcelona el lunes .
El dia del atraco al Banco Central ,estabamos nosotros casi al principio de las Ramblas.Lo cortaron todo y no dejaban pasar a nadie, claro, pero en aquellos momentos no sabiamos bien bien lo que pasaba ..policia habia muchísima ...
Ya podemos decir que el verano está aqui ...
Un beso.
Buenos días... Te he dejado comentarios desde el 5 al 7 de mayo. Te tengo muuuy abandonada últimamente, pero vaya, que conste que no es a ti nada más. Es que llego tan cansadísima a casa, que de lo último que tengo ganas cuando llego es de ponerme con el ordenador.
Esta semana ha sido especialmente dura... Ayer pensaba salir un rato, y al final cuando llegué, me senté en un sillón de la salita, picoteé algo para cenar y no eran ni las doce cuando estaba dando cabezás ahí... vamos, que me caía de sueño de lo reventaíta que estaba. En fin... Ya a partir de junio es posible que pueda volver a mi vida real, aunque aún no sé la fecha exacta... En fin, pero por el momento, sigo con este trabajito y al menos me sirve para oxigenar la cuenta bancaria que falta le hacía jejeje
Espero que el desconfinamiento vaya bien. ¿En qué fase estáis en vuestra provincia? Estoy tan sumida por el trabajo que apenas veo las noticias ni nada...
Está claro que de ésta vamos a salir completamente diferentes y espero que hayamos aprendido algo... aunque el futuro sigue siendo incierto, tengo la impresión de que vamos a tener que aprender a vivir con el virus. Al menos las muertes van bajando y la situación se va controlando, pero me da miedo de que con el desconfinamiento volvamos para atrás... y al mismo tiempo, no podíamos seguir confinados por nuestro equilibrio mental...
La foto es preciosa.
Besos.
Aquí entramos mañana lunes en fase 2. Y yo veo a la gente muy lanzada. Ayer sábado a la caída de la tarde el centro de Cartagena estaba lleno de gente. Y muchos ya pensando en reunirse para comer o tomar una cerveza... En fin, todo esto ya se permite pero habrá que tener la responsabilidad de no abandonar las precauciones.
Saludos.
¿Sabes realmente lo que pienso? Que los jóvenes realmente no están tan preocupados como la gente se piensa. Yo por ejemplo, en ningún momento he sentido miedo ni preocupación porque fuera a contagiarme de nada... Sí que me ha horrorizado ver la de muertes que ha habido y siguen habiendo por este motivo por la tele y demás, pero yo he seguido haciendo mi vida más o menos normal. Tomando las precauciones que nos han indicado y aconsejado, pero jamás en la vida he tenido realmente miedo por la enfermedad en sí.
He ido a trabajar, y tal y cual, y la única diferencia que he notado en este caso, es que cuando no estaba trabajando no podía salir de casa... a no ser que fuese a hacer la compra, claro. Bueno, también he visto interrumpidas todas mis actividades que digo yo que algún día podré retomar, aunque aún no sé exactamente cuándo.
Tengo 38 años (ya no sé si entro en "los jóvenes" a los que se refiere el texto), y sigo relacionándome con mis amistades más o menos igual que antes.
Yo no sé por qué hacéis referencia a que a los mayores les van a afectar más los cambios. A mis padres, los cambios y todo esto no les ha afectado mucho que digamos. Son jubilados y con su vida resuelta. Ésto les ha afectado a lo mejor psicológicamente (a mi madre sobretodo, mi padre ha seguido tan normal), y no creo que vayan a tener problema ninguno. Ni económico ni nada.
Sin embargo, sí pienso que para la gente joven esto va a ser una jodienda. Han visto su futuro truncado ya dos veces (al menos los que son más o menos de mi generación). Primero fue la crisis económica de 2008, y ahora la pandemia... Estudiantilmente hablando, laboralmente hablando y toda la pesca es una jodienda de tres pares de cojones.
Aunque también es verdad, que la gente joven puede que se adapte mejor a ciertos cambios que parece ser que van a haber a partir de ahora. Pero por lo demás, pienso que es mucho más fastidioso para alguien que se está labrando un futuro en este momento...
Que para alguien quién ya se labró su futuro en su momento, y que ahora tiene la vida más que solucionada.
corremundosHoy a las 00:35
eliocroca2Ayer a las 22:16
Joaki-007Ayer a las 18:15
angela.70Ayer a las 17:07
larocuky18/06/2025