var isMobileBrowser=false;
Solemos protegernos con una “coraza” cuando algún hecho o circunstancia nos atraviesa, con la creencia de que esta armadura nos protegerá del próximo incidente, golpe emocional o sentimientos negativos. Así, y a medida que las cosas nos pasan, colocamos coraza sobre coraza generando el efecto cebolla, una capa sobre otra capa, pensando que nos volvemos “más fuertes”, cuando en realidad sucede todo lo contrario. Es así que las corazas nos permiten mantener la ilusión de amparar nuestras creencias y nuestras emociones. Es una “ilusión” dado que, en poco de tiempo los demás las detectan.
Pensamos que cuando mas corazas tengamos más protegidos estaremos, esto sería totalmente cierto si estas corazas nos permitieran alejarnos solamente de quienes nos pueden hacer daño y no de quienes también nos aman … Por lo tanto, la armadura que nos protege también nos limita. Las corazas podrán ilusionarnos y ayudarnos a pasar situaciones muchas veces complejas, pero suelen funcionar como la balsa que nos permite atravesar ciertos ríos embravecidos, aunque una vez en tierra firme, si en vez de abandonarla, cargamos con ella, se convierte en fuente de cansancio y, más aún, de sufrimiento. Lo que, casualmente, es lo que queremos evadir al utilizar la coraza.
(Juan José Arévalo)
Estoy convencida de que no se puede ir siempre por la vida con una coraza temiendo que nos puedan herir con facilidad las circunstancias de la vida, las personas que llamamos tóxicas. Es cierto que hay que protegerse porque no hay nada peor que dar a los demás una imagen de fragilidad, de vulnerabilidad, que nos hace ser pasto del desprecio y de las injusticias.
Pero esta coraza, como dice el texto se nos puede volver en contra, nos protege pero también nos limita, porque tomamos distancia de quienes nos pueden hacer daño pero también de los que nos aman. Esto me recuerda el conocido poema de Benedetti, "Corazón, Coraza", que trata de un amor platónico tímido y confundido al que es imposible llegar, por una coraza cubierta de orgullo.
Como siempre, término medio, guardemos las distancias, estemos alerta pero dejemos fluir nuestros sentimientos para que lleguen a quienes tienen que llegar. No nos encerremos en nuestro mundo interior como podríamos hacerlo dentro de esta preciosa pila bautismal que no deja ver nada de lo que hay dentro. Protección total.
Besos
Desde luego, las corazas emocionales no son nada recomendables, porque, además de todos los inconvenientes expuestos más arriba, dan del individuo una imagen falsa, y eso condiciona mucho la reacción de los demás. Yo soy un defensor acérrimo de mi intimidad en todos los aspectos, pero creo que acorazarse es otra cosa, nada buena.
Buenas noches .
Preciosa pila bautismal, me encanta .
Pues no , desde luego que no se puede ir por la vida con una coraza pues igual que nadie puede "entrar" tampoco nosotros podremos en ocasiones salir .
Hay que ir por la vida y mas en estos momentos de tantas desgracias, con la cabeza levantada y con mucha prudencia , eso si , pero sin miedo -
El tema Covid no está ni mucho menos terminado y cada dia se estan infectado gente , mayor sobre todo,pero no por ello nos tenemos que encerrar en casa .Prudencia toda , miedo no .
Y el tiempo , pues ya ves ..una primavera en todo su apogeo pues segun dicen los entendidos , la primavera es esto.
Cuidaros
Bona nit .
Un beso
...y empieza la cuenta atras ¿no?...
Bonita foto
saludos
Joaki-007Hace 30 minutos
corremundosHoy a las 11:04
eliocroca2Ayer a las 22:12
angela.7020/06/2025
larocuky18/06/2025