Bergen

Noruega no es un país de grandes concentraciones urbanas. Al contrario, entre un paisaje natural exuberante, encontramos pequeños núcleos de población. Por ello no es de extrañar que con 280.000 habitantes, Bergen sea la segunda ciudad más importante de Noruega. Posee el principal puerto de Noruega, tanto en el aspecto comercial como militar o turístico. Considerada como “La puerta de los fiordos”, recibe cada año un importante volumen de visitantes.

Aquel primer día de crucero, teníamos programada por la tarde la visita a esta ciudad conocida por las siete montañas que la rodean. Lo primero que nos deslumbró, al bajar a tierra, fue el muelle“Bryggen”, en el antiguo barrio alemán, cuyos edificios comerciales parecen sacados de un decorado de película. Nuestros guías, uno de ellos español residente en Bergen, nos hablan su pertenencia a la Liga Hanseática, una federación de naturaleza comercial que operaba en los puertos del norte del continente. No muy lejos llegamos al“Fisketorget” o  mercado de pescado, que aunque actualmente se ubica en un moderno edificio, conserva el entorno de construcciones de madera características. Nos indican nuestros guías que toda esta zona de Bergen hubo de ser reconstruida tras el pavoroso incendio de 1702. Igualmente existe un mercado al aire libre donde los pescados frescos alternan con los envasados. Naturalmente no falta el salmón salvaje o la carne de ballena. Y es que a pesar de las restricciones internacionales a la caza de ballenas, países como Islandia, Noruega o Japón no renuncian a una actividad ancestral. También hay que señalar que en Noruega los precios no son precisamente baratos.

Igualmente nuestros guías nos conducen a la cercana Iglesia de Santa María, un templo románico del siglo XII, el edificio más antiguo de la ciudad. Aunque está cerrado, nos comentan que cuenta con un bello retablo en su interior. Hemos de decir que encontramos un extraordinario ambiente en las calles y puerto de Bergen, sin duda propiciado por ser sábado y por ser un día inusualmente soleado, cuando a la ciudad se le conoce como la “Seattle” de Europa por su alto índice de pluviosidad. Además hay mucho ambiente juvenil y es que en la Universidad de Bergen estudian unos 16.000 jóvenes.

La moderna ciudad de Bergen dispone de amplios espacios y tiene una gran oferta museística y cultural a lo largo del año. Una importante programación de festivales recorre el calendario, de entre los que destaca el Festival Internacional de Bergen (http://www.fib.no) evento que se celebra cada año en el mes de Mayo.

Imagen cedida por mi compañero de viaje y universidad, Pepe Munuera: Edificios del muelle Bryggen en Bergen.