Antonio Ferrandis en lo alto de la Colegiata

  La asociación de vecinos Gigia, en el barrio de Cimavilla, tiene una revista, La Atalaya del Playu, que publica más o menos por estas fechas. Es la típica publicación de una asociación: los negocios del barrio se publicitan, aparecen reseñas sobre las actividades del año, quejas por la inactividad del Ayuntamiento (estamos al lado de la Plaza Mayor, pero podríamos estar en Andorra, para el caso; claro que seguramente allí estaríamos mejor)... y un par de reseñas sobre el cine en el barrio.

    Una sobre el Cine Brisamar, que estaba en los bajos de un edificio de viviendas y actualmente es un aparcamiento; fue uno de los dos cines que tuvo el barrio (el otro era de la Parroquia de San Pedro), y en su mayor parte era de Arte y Ensayo; salvo por vacaciones, que ponían películas familiares.

  El siguiente artículo era de cuando se rodó "Volver a empezar", de Garci, en Gijón. Se rodó más o menos por las fechas en las que el Brisamar cerraba. Y se ilustró dicho artículo con la foto que usé como modelo.

  No recuerdo haber visto la película, pero recuerdo haber visto a Antonio Ferrandis (el eterno Chanquete, no sé si para su pesar), mientras se rodaba la escena de la foto. Estaba situado en lo alto de la Colegiata, frente a la Casa de Paquet; bajaba dando un paseo y entraba en un taxi (que entonces eran negros), cerraba la puerta y marchaba. Sólo que la puerta no cerró. Imagino que repetirían la escena, claro, pero no me quedé a verlo, no recuerdo por qué. En cualquier caso, debe ser lo más cerca que estuve de un rodaje.

  El dibujo es de tamaño cuartilla sobre papel de bambú, a rotulador calibrado de 0.2 y rotulador de punta de pincel. El color fue realizado con Gimp (y si llego a darme cuenta del tiempo que me iba a llevar, lo hubiera dejado en blanco y negro: todos esos barcos y paseantes...el horror).

  Hay muchas cosas en esta escena que han cambiado radicalmente: todas las barcas de la escena eran de pescadores, de madera, con un par de bancos y las cubiertas al aire. El barco podría ser de carga. Estos ya no se ven en el Puerto de Gijón, porque pescadores, carga y pasaje se reciben ahora en el Puerto del Musel, al otro lado de la Bahía de Gijón. Tampoco existe Portuarios (el edificio colorado de la escena), que fue demolido, y los carriles que malpuse en el dibujo pertenecían a dos grúas con cubierta de madera que subían las barcas para su mantenimiento. Por supuesto, desaparecieron en cuanto se reformó el paseo, que ahora tiene barandilla.

  Como dicen Los Luthiers, todo tiempo pasado fue... anterior. Ni mejor, ni peor, pues la naturaleza de la vida es cambio. Pero a veces, cosas como ésta te hacen echar la mirada atrás. En fin...