DIMINUTIVOS CARIÑOSOS

Escribimos este artículo no arrecíos de frío, no: arreciítos, que es mucho más sevillano. Con tela más de frío. Donde quizá los lingüistas profesionales no se hayan percatado de algo que olemos los aficionados. Que en el habla vieja de Sevilla, especie tan en peligro de extinción como el señorito, el diminutivo es caprichoso y multiusos. A veces el diminutivo es aumentativo, y basta con el ejemplo que he puesto. Se tiene mucho más frío cuando está uno arreciíto que cuando se está simplemente arrecío. Un niño chico tiene mucho más sueño cuando está muertecito de sueño que cuando está muerto de sueño. Y así podríamos poner otros muchos ejemplos.

El sevillano le pone ternura a lo que aprecia por medio del diminutivo. Que se lo aplica a todo, nombre o adjetivo y también, contra lo que no reconoce la Academia, a adverbios y gerundios, como explicamos aquí el otro sábado. Esos deliciosos diminutivos de gerundio: andandito, corriendito, apagandito...

Dicen que el gerundio es invariable, pero el sevillano le mete el diminutivo para hacerlo más entrañable. Y dicen que el adverbio también es invariable, y el sevillano le mete la ternura del diminutivo.

(Antonio Burgos)

Igual que la misma palabra tiene un sentido diferente ya se diga en masculino o en femenino (el femenino suele ser más despreciativo en este caso porque no es lo mismo un fulano que una fulana, un zorro que una zorra), la cuestión del diminutivo cambia también mucho las cosas. Y en eso, como bien dice Antonio Burgos, los sevillanos , como en muchas otras cuestiones, son unos artistas.

A veces funciona de aumentativo, como en el ejemplo que pone del frío. Por aqui también se dice eso de "estoy heladita de frío", que es un diminutivo engañoso, y da como más pena de quien lo dice. Ternura, en palabras de Burgos.

Y si el sevillano nace donde le da la gana, habla como le da la gana y pone diminutivos allí donde le parece que hay que añadir afecto y viven cerquita o lejitos. Están mejorcitas o regularcitas y te contestarán ahora mismito en cuantito te vean.

Todo es así más entrañable. Aquí está La Giralda, brillandito en la oscuridad, cerquita del cielo.

Dedicado a mis amigos sevillanos, en especial a Miguel el Trianero.

Besos.