Durante la infancia, la cosa va bien. Pero el drama llega con la adolescencia. Las madres enrolladas habrán urdido más pellas que tú, se habrán emborrachado más que tú, habrán tenido más novios que tú y habrán hecho más Interrails que tú. Y se empeñarán en alardear de ello ante sus hijos y en propagarlo a los cuatro vientos. ¡Y eso que en aquella época no había Facebook ni Instagram y sólo pueden dar testimonio de sus hazañas unas roñosas fotos del pleistoceno!
Reconozcámoslo. Todos tenemos en algún momento la tentación de ser padres enrollados. Es mucho más apetecible ser el guay que el coñazo y responsable. ¿Quién no se ha dejado llevar en alguna ocasión?
Todavía recuerdo la cara de espanto de mi hija cuando me puse a bailar el Just Dance en presencia de sus amigas. Poseída por el espíritu de Gloria Gaynor, comencé a emular los pasos del juego de la Wii. Sí, lo admito. Tal vez me excedí en los movimientos de cabeza, en los aspavientos con los brazos y en los decibelios de la voz. Justo cuando estaba en plena vorágine dándolo todo, pude observar en la lejanía el rostro avergonzado de mi hija haciéndome gestos para que parase en seco mi memorable actuación.
(Ana del Barrio)
Mira que es difícil ser buena madre (o buen padre, para el caso es lo mismo). Saber estar en el sitio justo, ni pasarse ni quedarse corto. Ni ser una madre excesivamente estricta y despegada ni querer intentar a toda costa ser una espeie de colega de tus hijos. Madre no es igual a amiga. hay que intentar acercar posiciones pero nunca superponerlas, porque una de las dos va a fallar. Los padres son referentes a lo largo de toda su vida. Los padres damos amor incondicional, apoyo, guía (cuando nos dejan), comprensión, protección ....y creo que es ahí donde debemos estar.
A veces sin darte cuenta quieres parecer simpática y cercana y no eres consciente de que a tu hija, como lo que cuenta Ana del Barrio, la estás poniendo en un compromiso y eso en la adolescencia debe marcar, y mucho, delante de los amigos. Más adelante, pasados esos años, la cosa ya es diferente. "Cada uno a lo suyo y Dios en lo de todos."
De todas formas, hay que estar siempre atentos, vigilantes pero sin estar encima, como quien observa las barcas del Retiro desde los árboles de tierra firme.
Besos.
¡Ay, qué difíciles son a veces los términos medios! Y en este caso más que en cualquier otro. Educar a un hijo no es enseñarle un sistema de vida (haz esto, no hagas aquello), sino inculcarle valores que acaben siendo completamente suyos. Y la reacción puede ser de aceptación total (esa continuación nuestra que tanto nos gusta a los padres) o de absoluto rechazo, cuando el hijo quiere construir su propia vida desde cero, como tanto les gusta a algunos políticos. En el término medio está el acierto, pero no siempre resulta fácil encontrarlo.
¡Hola!
Yo como siempre fui un espíritu individualista, nunca hice por formar una familia. Pero siempre he pensado de que eso de ser padres debe ser muy complicado. Quiero pensar que si hubiese llegado el caso habría sido un buen padre, pero....... después cada hijo sale de una manera y acertar no siempre es fácil.
Buen inicio de semana. Saludos.
Buenas tardes.Bona tarda .
Ahi está ,si señor ..."estar siempre atentos, vigilantes pero sin estar encima" , sobre todo hoy en dia y hasta cierta edad, claro. Los "peligros" están por todas partes y tenemos que estar muy atentos ...malo el que no lo está y malo el que , vá a buscar a su hija o hijo a la discoteca por mieda a...
Es dificil de todas formas pues no todos los adolescentes son iguales.Pero yo desde luego , soy mas de "vigilar" , aunque sea "·fisgar" en sus cosas pues no es ningún delito y muchas veces podemos ver algo que no nos gusta y que , ni idea teniamos ...
Hombre , el "fisgar en sus cosas" segun cuando y según que "miedos" podamos tener,claro...
Un beso .¡¡
Mañana me toca " sesión dentista" ..ay ay ...
Ay... yo como hija, creo que mi madre lo ha hecho bastante bien. Mi padre quizás ha fallado en algunas cosas, pero en otras ha sido buen padre. No se puede acertar en todo, claro está. Habría que verme a mí si fuese madre... psss...
Nunca han estado especialmente encima, pero sí recuerdo de un noviete que tuve de más jovencita que no les gustaba, y me vinieron a buscar cuando la abuela me invitó a comer... eso no me gustó, porque sin embargo, con mi hermano no hacían esas cosas. En este tipo de asuntos, mi hermana y yo éramos otra historia distinta que mi hermano, eso nos ponía negras. Si he de equivocarme, he de equivocarme yo sola y darme cuenta yo sola, no hace falta que me venga nadie a dar el tirón de orejas, y menos de esa manera. Pero en fin, es una anécdota entre tantas, y supongo que el manual de padres tampoco existe por muchos libros que haya que hablen de esos asuntos.
Joaki-007Hace 41 minutos
mandarina1981Hoy a las 07:52
astur_82Ayer a las 23:07
eliocroca2Ayer a las 22:03
angela.69Ayer a las 18:53
