Japón está reabriendo paulatinamente todos los parques de atracciones, desde que el lunes se levantara en ese país el estado de excepción por la crisis del coronavirus. Sin embargo, los clientes tendrán una serie de normas nuevas que cumplir, como no gritar.
La asociación que agrupa a estos parques temáticos ha redactado una guía de normas nuevas por Covid-19 para los clientes y el personal. Entre las nuevas pautas destaca que se pida a los visitantes mantenerse "callados" y usar mascarillas mientras montan en las atracciones. Será más complicado de cumplir, al menos lo de no gritar, en las grandes montañas rusas. La intención es evitar que los usuarios de las atracciones diseminen el virus en caso de ser un caso asintomático, y reducir la posibilidad de nuevos contagios. La guía estipula que si algunos artistas no pueden actuar con mascarillas deberán respetar la distancia mínima de un metro respecto de los visitantes. Al resto de personal también se le exige que mantenga con los clientes conversaciones lo más breves posibles, incluso si todos portan mascarilla.
"Un nuevo estilo de servicio al cliente", es como lo han llamado.
(20minutos)
Cuando empecé a leer este artículo pensé que es lo que se corresponde con esta sociedad japonesa tan discreta, educada y poco expresiva. Pero no iba por ahí la cosa. No se grita y no se habla a voces para no diseminar los posibles virus. Hablar lo imprescindible y si es con mascarilla mejor. Tendremos que copiar de ellos que en estas cosas del distanciamiento social y del respeto al espacio del otro nos llevan mucha ventaja.
En un Parque de atracciones es mucho pedir porque dependiendo de las atracciones es difícil guardar la compostura cuando estás echando fuera una carga de adrelina. Pero no estaría mal si este silencio, eso de dejar las voces y los improperios a un lado, lo aplicáramos también en la vida cotidiana, y especialmente nuestros políticos con el espectáculo que nos regalan cada día en el Congreso. Provocaciones, descalificaciones e insultos al por mayor, cuando lo que habría que hacer es tener respeto y educación. ¿No merecen las víctimas y sus familias poder escuchar estos días un poco de silencio?
No había silencio entonces y sí muchas aglomeraciones en Eurodisney, en París, en el año 2008, de cuando es esta foto. Pero había alegría y despreocupación.
Besos.
Si los políticos lanzasen todos sus improperios y denuestos protegidos por una mascarilla, quizá resultasen un poquito más "lights". Pero eso sería mucho pedir, así que también en este punto hay que quitarse el sombrero ante la iniciativa japonesa (seguro que en el país del Sol Naciente son capaces de no gritar en las montañas rusas).
Buenas noches .
Los parques de atracciones, son un peligro grande en estos tiempos ya que se mezclan muchas cosas .Sobre todo, esos "gritos" que se dán por ejemplo en una montaña Rusa .Y como dicen que esas gotitas de saliba que lanzamos pueden transmitir el virus,pues eso.
Oi el otro dia que , en una terraza , alguien que esté a tu lado fumando , puede ser peligroso ya que con el humo pueden salir particulas de saliba tambien ...
A mi las caravanas ya me gustan , siempre me han gustado, pero claro como dices , todo tiene su epoca y su edad.Seguro que ahora igual me cansaban .
Pasar buena noche .
Besos.
Los pobladores del Mediterráneo solemos ser bastante vocingleros. Y como bien dices no nos vendría mal algo más de silencio en nuestra vida cotidiana.
Lo de los políticos de vergüenza ajena.
Saludos.
En cuanto a la distancia de seguridad ya he visto tres distancias distintas. Un metro, metro y medio y dos metros... a ver si se aclaran.
Fíjate que el ir a un sitio de estos, o al fútbol o sitios parecidos servían para desfogar, pues ya ni eso vamos a poder hacer jejeje Aunque sinceramente no sé entonces para qué nos ponemos mascarillas. Cada día estoy más convencida de que no sirven para nada, porque aún poniéndotelas te lo prohíben todo.
Joaki-007Hoy a las 12:30
mandarina1981Hoy a las 07:52
astur_82Ayer a las 23:07
eliocroca2Ayer a las 22:03
angela.69Ayer a las 18:53
