Calle Santa Lucía, 1

 Esta calle es paralela a la Calle Corrida, y forma parte de lo que siempre se conoció como Ruta de los Vinos. La puerta tiene a un lado una vieja lencería, ya cerrada, supongo que por jubilación; al otro lado, hay una bocatería. No es un edificio particularmente bonito o feo, aunque el tiempo le da cierto encanto. Pero en mi empeño por acabar con el taco de papel de acuarela de tamaño foto, trato de buscar temas sencillos.  

   Y una puerta es un tema sencillo, y más entretenido que un bodegón, que personalmente me aburren (aunque reconozco que son un buen tema para mejorar la técnica). No hay mucho más que pueda decir: la tentación sería divagar sobre su papel como accesos, el simbolismo que se puede dar a ello y todas esas cosas; podría estar bien, pero no estoy en el ánimo de hacerlo y escribir es algo sobre lo que no tengo apenas técnica, ni busco. Así que escribo como me sale, básicamente. Hoy no se me ocurre nada, así que lo que tenemos es una puerta vieja, pero cuidada, y un número de calle pintado en un azulejo. Es un tema sencillo, que me ha quedado razonablemente bien.

   Eso sí, un detalle: soy muy irregular respondiendo a la gente que me visita. Me temo que si no lo hago en el momento, sencillamente se me va. Y no se me dan bien las fórmulas de cortesía por escrito. Así que me disculpo si habéis dejado mensaje en vuestras visitas y no contesto. Sabed que agradezco que paséis por aquí; es sólo que a veces no sé cómo contestar. Soy un patán, lo sé. Pero soy un patán agradecido, de verdad.